Macroeconomía | © John Petroff; contributors: Elisa Tam, Christian Aleman, Blanca Garcia-Puente, Daniel Gonzalez, Isliani Perez et al. Source: PEOI |
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El propósito de esta lección es mostrar dos puntos de vista distintos del ciclo
económico y los problemas principales del desempleo y la inflación. Primero se presenta la teoría
clásica. La visión Keynesiana se expone como crítica a la teoría clásica.
TEORÍA CLÁSICA
La teoría clásica consiste esencialmente en la aplicación del
«laissez faire» («dejar hacer») del capitalismo puro, es decir,
la no interferencia
del gobierno. En esta visión, los ciclos económicos
son
procesos naturales de
ajustes que no requieren de ninguna acción por parte del gobierno.
En la explicación de Adam Smith sobre la mano invisible, esto es, el proceso que hace que las empresas produzcan lo que la gente desea, el gobierno no es necesario. La economía resuelve por sí sola sus problemas. |
LEY DE SAY
La ley de Say afirma que la oferta crea su propia demanda. Esto significa que
la renta que alguien
obtiene de la producción de ciertos bienes le permitirá comprar
mercancías
producidas por otros. Puesto
que todo el mundo necesita comprar mercancías, intentarán producir bienes
para
obtener ingresos y así
comprar lo que desean. De este modo, los mercados de productos estarán
necesariamente en equilibrio
constante.
Los trabajadores obtienen ingresos para poder comprar los distintos productos que desean. Así, trabajando y produciendo mercancías, estos trabajadores generan los ingresos con los que comprar estas mercancías. |
MERCADO MONETARIO CLÁSICO
Si parte de la renta no se consume inmediatamente, entrará en el mercado
monetario como ahorro. Este
ahorro volverá a la economía como inversión (aumento de capital)
cuando alguien
solicita un préstamo.
El interés pagado por los prestatarios a quienes ahorran asegura que no haya
ahorros no utilizados. El
mercado monetario alcanza el equilibrio por medio de un ajuste en la tasa de
interés.
El interés que se paga a los ahorradores es un estímulo para prestar dinero. Cuando la tasa de interés es alta, la gente se siente más inclinada a ahorrar o prestar. Por otra parte, si la tasa de interés es alta, los prestatarios no desearán grandes préstamos. Así, el mercado tiende al equilibrio gracias a la influencia de la tasa de interés. |
FLEXIBILIDAD DE PRECIOS Y SALARIOS
La teoría clásica propone que todos los mercados alcanzan el equilibrio
gracias
a ajustes en precios y
salarios, que son flexibles. Por ejemplo, si existe un exceso de fuerza de
trabajo o de productos, el salario
o el precio de éstos se ajustará para absorber dicho exceso.
Si los precios y los salarios son flexibles, los mercados se equilibran. Por ejemplo, si hay mucho desempleo, las empresas pueden emplear trabajadores pagando salarios más bajos, pero al emplear a más trabajadores reducen el desempleo. |
DESEMPLEO INVOLUNTARIO
La teoría clásica propone que no existe desempleo involuntario porque un
ajuste
en los salarios asegura
que los desempleados encontrarán otro empleo. Además, como los
trabajadores
necesitan comprar
mercancías, aceptarán trabajos peor pagados.
Si los salarios son flexibles, como aseguran los economistas clásicos, una disminución de salarios permite que las empresas empleen a más trabajadores. Solamente aquéllos que son renuentes a trabajar por salarios más bajos seguirían en paro. |
CONTROVERSIA ENTRE LA TEORÍA
CLÁSICA Y LA DE KEYNES
La teoría del empleo de Keynes parte de una crítica a la teoría
clásica. En
esta crítica, Keynes argumenta
que:
§ ahorradores e inversores tienen planes incompatibles, por lo que es posible
que no se llegue a establecer
un equilibrio en el mercado monetario,
§ los precios y los salarios tienden a ser rígidos, por lo que es posible
que
no exista equilibrio en los
mercados de productos y de trabajo,
§ han existido períodos de desempleo severo (afirmación que la teoría
clásica niega).
La teoría de Keynes se publicó inmediatamente después de la gran depresión. En esa época resultaba muy difícil sostener que solamente existe desempleo voluntario, cuando millones de trabajadores estaban en paro. |
PLANES DE AHORRO-INVERSIÓN
DE KEYNES
Keynes demostró que ahorristas e inversores son grupos que no siempre se
relacionan: están separados
por intermediarios financieros (bancos). Durante una recesión, aunque el tipo
de interés sea muy bajo, la
inversión puede no igualar al ahorro porque 1) los prestatarios tienen pocas
perspectivas de ventas, 2) los
bancos no se animan a prestar porque lo consideran arriesgado, y 3) los
ahorradores prefieren esperar que
haya intereses más altos. Esto causa la denominada "trampa de liquidez", donde parte de
los ahorros son
improductivos.
Los bancos tienden a ser muy prudentes a la hora de conceder préstamos a empresas cuando las previsiones económicas no son prometedoras, y esta reticencia contribuye a agravar la desaceleración económica. |
RIGIDEZ PRECIOS-SALARIOS SEGÚN
KEYNES
Keynes postula que los precios y los salarios no son flexibles, como afirma la
teoría clásica. Los salarios
tienden a tener un límite inferior, es decir, a no bajar de un cierto
mínimo
porque los trabajadores no
aceptan salarios que no les permitan vivir adecuadamente; esto se refuerza por
las acciones de los
sindicatos. Si los salarios son demasiado bajos, existirá desempleo. En el caso
de los precios, las empresas
que producen artículos muy caros prefieren reducir la producción y
despedir a
trabajadores que bajar los
precios. Esta situación se debe a su poder monopolístico.
Desde mediados de los años 80, se han dado varios casos en los que los empleados han aceptado recortes en sus salarios, por ejemplo, en las líneas aéreas y el sector del acero. Aparte de estas excepciones, las disminuciones de los salarios son extremadamente raras. La pauta general es de aumentos continuos, equivalentes al menos a la suba en el costo de la vida. |
DEMANDA AGREGADA
La demanda agregada representa gráficamente la suma
total de lo que las familias quieren y pueden comprar a distintos
niveles de precios.
La demanda agregada puede considerarse como una combinación de todos los productos que la gente puede desear comprar. |
EFECTO REAL DEL EQUILIBRIO
La demanda agregada es una curva de pendiente descendente debido al efecto real
del equilibrio, ya que
si los precios son más altos que el promedio, el poder adquisitivo del dinero disminuye y la
gente tiende a sentirse más
pobre y compra menos. Si los precios son más bajos que el promedio histórico, el poder adquisitivo del dinero
aumenta, y la gente tiende
a sentirse más rica y a comprar más.
La relación matemática entre los tipos de interés y los activos financieros es inversamente proporcional. Los mercados de acciones, como la Bolsa de Valores de Nueva York, son muy sensibles a la inflación, causa principal de la subida de los tipos de interés. Esta sensibilidad se observó en el desplome de la bolsa del 19 de octubre de 1987, así como en las reacciones del mercado de valores cuando el Banco de la Reserva Federal en Estados Unidos bajó los tipos de interés en 2001. |
OFERTA AGREGADA
La oferta agregada se compone de tres secciones: el tramo clásico
es vertical, el tramo de Keynes es horizontal y el tramo intermedio
es ascendente.
La oferta agregada se puede explicar como la combinación de todos los bienes producidos por las empresas: equivale al PNB, descontando la actividad económica del gobierno. |
TRAMO CLÁSICO
El tramo clásico de la oferta agregada es vertical por la proposición de
la
teoría clásica de que los
precios se ajustan de modo que el resultado sea siempre el pleno empleo. En
este tramo, una demanda
agregada en expansión causa inflación, mientras que una demanda agregada
en
recesión la reduce.
Hay muchos sectores de la economía en los que todos los ajustes se producen mediante cambios en los precios. Por ejemplo, en los bienes relacionados con la moda, si hay una gran demanda de un vestido, su precio será muy alto, pero si el vestido está pasado de moda, el precio será muy bajo y, finalmente, se dejará de producir. |
TRAMO KEYNESIANO
El tramo keynesiano de la oferta agregada corresponde a la proposición de que
cuando el precio es muy
bajo, las empresas prefieren reducir la producción en vez de vender con
pérdidas. En esta curva, cualquier
cambio en la demanda agregada producirá un cambio en la producción.
Así, en
caso de recesión, la
política gubernamental correcta es incrementar la demanda agregada, por
ejemplo, aumentando el gasto
público.
Muchos sectores de la economía experimentan muy pocos cambios en los precios, pero sufren cambios importantes en el volumen de producción y el número de empleados. Por ejemplo, los fabricantes de automóviles ofrecen rebajas que no llegan ni al 10% del valor del vehículo. Comparado a cambios de precio del orden del 50% o más en la ropa, por ejemplo, las rebajas en los automóviles son muy pequeñas. La razón es que los costes de producción fijos en este sector son muy grandes. No es infrecuente el cierre de plantas enteras de montaje de automóviles durante las épocas de recesión. |
TRAMO INTERMEDIO
Este tramo intermedio de la oferta agregada representa el caso de la inflación
preliminar o sectorial:
cuando la demanda crece, algunos sectores de la economía pueden sufrir
cuellos de botella y requerir
que los precios aumenten, porque no pueden incrementar la producción.
Algunos sectores de la economía tienden a experimentar cambios de precio y cantidad al mismo tiempo. Esto sucede en todos los sectores de bienes de consumo, tales como radios y televisores, o de equipamiento deportivo. |
POLÍTICAS DE LA DEMANDA AGREGADA
Cuando la intersección de la oferta y la demanda agregadas ocurre en el tramo
horizontal keynesiano se
produce recesión y excesivo desempleo: la política recomendada
sería estimular
la demanda agregada, o
sea, incrementar el gasto. Cuando la intersección está situada en el tramo
vertical clásico, existe inflación:
la política recomendada sería reducir la demanda agregada, o sea, reducir
el
gasto.
Durante los años 60 y 70, la administración estadounidense hizo hincapié en estimular la demanda agregada para controlar el desempleo. El control de la inflación se alcanzó con la ayuda de cambios fiscales o controles sobre precios y salarios. |
POLÍTICAS LATERALES DE LA
OFERTA
Las políticas laterales de la oferta se pueden mostrar atribuyendo los
períodos de estanflación (precios
altos y bajo nivel de producción) a desplazamientos ascendentes de la oferta
agregada. La política
recomendada entonces no sería una demanda agregada creciente que
agravaría la
inflación, sino por el
contrario, un desplazamiento descendente de la oferta agregada mediante la
reducción de los costes de
producción.
Durante los años 80, la administración estadounidense intentó controlar la economía utilizando medidas que afectaban a la oferta. Por ejemplo, las regulaciones, restricciones y subsidios decretados por las agencias gubernamentales afectaron a los costes de producción. |
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